En el fondo del océano Atlántico Sur, a 100 kilómetros de Mar del Plata, se desarrolla una expedición científica pionera que promete cambiar la mirada sobre la biodiversidad marina argentina. Liderado por el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet), junto a la fundación Schmidt Ocean Institute, un equipo multidisciplinario explora el cañón submarino Mar del Plata, un ecosistema hasta ahora poco estudiado pero de enorme valor biológico.
La campaña, llamada “Underwater Oases of Mar Del Plata Canyon: Talud Continental IV”, utiliza tecnología de vanguardia, como el vehículo operado remotamente (ROV) SuBastian, capaz de descender hasta 3900 metros para captar imágenes en ultra alta definición y recolectar muestras sin alterar el entorno. Por primera vez en la región, estas inmersiones en vivo están siendo transmitidas para que el público mundial pueda observar en tiempo real la vida abisal.
El equipo, conformado por más de 30 investigadores de diversas instituciones nacionales, ha identificado ya más de 120 especies de invertebrados, incluyendo esponjas gigantes, corales de aguas frías, crustáceos y peces no registrados anteriormente. El cañón funciona como un corredor ecológico y guardería natural para larvas y juveniles, alimentando pesquerías clave para el país.
Sin embargo, los científicos también detectaron señales preocupantes, como microplásticos y vestigios de pesca de arrastre a más de 2500 metros de profundidad, alertando sobre la penetración humana en los ecosistemas más remotos. Por ello, el equipo impulsa la creación de la primera Área Marina Protegida en la zona, proponiendo una moratoria a la pesca de arrastre, monitoreo continuo y fortalecimiento legal.
“El futuro del mar argentino dependerá no solo de la ciencia, sino también de la voluntad política y la presión social para proteger este patrimonio”, afirmó Daniel Lauretta, jefe científico de la misión.
La expedición no solo amplía el conocimiento científico sino que también promueve una ciencia abierta e inclusiva, con datos disponibles en repositorios públicos y material educativo para la comunidad.
Este hito marca un antes y un después para la oceanografía argentina y representa una invitación a repensar la relación con el océano profundo antes de que las amenazas lo degraden irreversiblemente.