La reciente muerte de la exboxeadora conocida como “Locomotora Oliveras”, producto de un accidente cerebrovascular (ACV) isquémico, volvió a poner en foco la importancia de la prevención y el tratamiento adecuado de la hipertensión arterial, una afección que afecta a cerca del 40% de los argentinos, pero que en muchos casos permanece sin diagnosticar.
El cardiólogo Daniel López Rosetti explicó este martes en una entrevista con LN+ que la hipertensión “es el primer antecedente para el desarrollo de un ACV”. Por su parte, Alejandro Musacchio, jefe de Neurorradiología del Hospital Cullen de Santa Fe —donde Oliveras estuvo internada durante dos semanas— reveló que la exboxeadora “tenía una patología en la arteria carótida derecha, era hipertensa y no se hacía controlar”.
Según Rosetti, la mitad de quienes padecen hipertensión desconocen esta condición. De quienes están diagnosticados, sólo la mitad recibe medicación, y de ese grupo, apenas un 20% logra mantener sus valores de presión arterial dentro de los parámetros recomendados.
El especialista añadió que, aunque el ACV es más frecuente en hombres, suele ser más grave en mujeres, especialmente después de la menopausia, cuando pierden la protección hormonal de los estrógenos.
Respecto a los valores ideales de presión arterial, López Rosetti indicó que deberían situarse en torno a 120/80 mmHg, mientras que en Argentina se considera hipertensión cuando la presión supera los 139/90 mmHg. Recomendó el uso de equipos electrónicos digitales para una medición más precisa y resaltó la importancia de consultar regularmente al médico.
Finalmente, recordó que otros factores de riesgo como la diabetes y el colesterol alto también contribuyen al desarrollo de enfermedades cardiovasculares y enfatizó que incluso pequeñas elevaciones en la presión arterial pueden tener un impacto significativo en la salud cardíaca a largo plazo.
“Un aumento de apenas 10 milímetros de mercurio puede significar un estrés constante para el corazón, que late millones de veces al año”, concluyó el cardiólogo.